Monitorización de estado para el mantenimiento predictivo de instalaciones automáticas
La monitorización de LCA permite supervisar el estado de nuestras instalaciones empleadas a escala mundial. La gran importancia de un sistema de verificación como éste radica en que con frecuencia las instalaciones se mantienen en funcionamiento con cargas completas hasta que fallen (aplicando el concepto run-to-failure, es decir, el mantenimiento reactivo). Como resultado, las instalaciones fallan sin avisar, lo que provoca una parada imprevista de la producción.
Para determinar el estado de unas instalaciones se emplea la mayor cantidad disponible de datos con el fin de evitar costos adicionales en sensores. Así, por ejemplo, se pueden obtener a través de los convertidores de frecuencia datos sobre la corriente, la tensión y la posición de los ejes servoasistidos, o medir la presión y el tiempo de respuesta de los cilindros neumáticos, por ejemplo. La evaluación de estos datos permite determinar el estado exacto de las instalaciones.
En particular, la evaluación concluyente de los datos representa un gran desafío, puesto que una instalación de grandes dimensiones puede tener más de 100 cilindros neumáticos, 30 ejes, varios sistemas de transporte, etc. La evaluación de estos datos ocupa el primer plano en el desarrollo de sistemas de monitorización de estado. En definitiva, el objetivo consiste en definir el estado real de las instalaciones a partir de esta multitud de datos y visualizarlos a los niveles adecuados.